10 de abril. Día Mundial de la Homeopatía.
Entramos en el mes de abril, y dejando de lado (momentáneamente) la patología primaveral, hoy me gustaría hacer mención al Día Internacional de la Homeopatía, que se celebra el próximo domingo día 10.
Si revisamos los últimos acontecimientos que han tenido lugar en torno a la homeopatía, la celebración de este día puede no traernos demasiadas alegrías: se han sucedido diversas mesas redondas en las que se desacredita el uso de estos medicamentos, las redes sociales tienden a posicionarse contra su utilización, se han anulado cursos de formación sin razones aparentes, se han sucedido malinterpretaciones (quien sabe si intencionadas) de ciertas declaraciones… Es cierto, no parece un porvenir halagüeño… Pero, como hago siempre parafraseando a Galileo, los profesionales, usuarios y pacientes que conocemos la homeopatía tendríamos que exclamar“…y sin embargo, se mueve… “.
Pues sí, la homeopatía se mueve: se mueve porque cada vez hay más pacientes interesados en curar patologías o mejorar su calidad de vida con estos medicamentos seguros, eficaces y sin reacciones adversas reseñables; se mueve porque proporciona remedio en situaciones en las que la medicina convencional no llega o se queda corta, complementándola de una manera muy efectiva; se mueve porque cada vez somos más profesionales sanitarios que constatamos sus efectos beneficiosos; se mueve y muy ampliamente en países en los que se encuentra incluido en los sistemas sanitarios de forma normal; se mueve porque se han descrito efectos positivos en animales y en bebés en los que el efecto placebo tan esgrimido por los contarios es muy discutible; se mueve con los ensayos que se realizan para comprobar sus efectos y que sólo son invisibles a los ojos de quien no los quiere ver. En definitiva, se mueve, y se seguirá moviendo, aunque a algunos no les guste.
Por eso, en este Día Internacional de la Homeopatía sería muy interesante que cada uno, (favorable, escéptico o contrario) haga una reflexión interna y objetiva sobre el hecho de cómo la incorporación de un método terápeutico complementario como la homeopatía puede ser beneficioso para conseguir un tratamiento integral y completo de cada paciente, aportando una herramienta más en el arsenal terapéutico de los profesionales sanitarios.
¡Que tengáis un muy feliz Día Internacional de la Homeopatía!